Los países de la UE que ratificaron el Convenio se comprometen a trabajar conjuntamente para limitar, reducir e impedir gradualmente sus descargas de contaminantes atmosféricos a fin de combatir la contaminación transfronteriza resultante.
El Convenio exige a sus partes contratantes que
desarrollen y apliquen políticas y estrategias adecuadas, especialmente
sistemas de gestión de la calidad del aire.
Las partes
contratantes aceptan reunirse periódicamente (al menos una vez al año) para
evaluar los avances realizados y colaborar sobre asuntos relativos al Convenio.
Cooperación científica
Las partes acuerdan
emprender esfuerzos concertados de investigación y desarrollo, especialmente
para reducir las emisiones de los principales contaminantes atmosféricos,
vigilar y medir los índices de emisiones y las concentraciones de estos
contaminantes, así como para comprender mejor los efectos de estos
contaminantes sobre la salud y el medio ambiente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario